"Necesario fue el pecado de Adán, que ha sido borrado por la muerte de Cristo. ¡Feliz la culpa que mereció tal Redentor!" Estas palabras, proclamadas por toda la Iglesia en el Exsultet de la Misa de Vigilia de Resurrección, resumen poderosamente el salvífico Misterio Pascual de Jesucristo. Jesús es nuestro Redentor glorioso que realmente nos salva del pecado y nos abre las puertas de nuevo al don de la vida eterna. Esta sesión explorará exactamente por qué Jesús tuvo que morir en la cruz y por qué Su Resurrección y Ascensión son tan necesarias para llevar a cabo nuestra salvación.

Lee y estudia: El Catecismo Católico de los Estados Unidos para Adultos Capítulo 8 (páginas 95-107)