"No matarás" (Éxodo 20,13). En la Encarnación, Cristo asumió la naturaleza humana y le otorgó una dignidad increíble a la humanidad. Esta dignidad maravillosa debe ser defendida en cualquier etapa y circunstancia. La pobreza, el aborto, la guerra, le pena capital, la eutanasia, el abuso y cualquier otra condición degradante para el ser humano debe oponerse de manera heroica. Esta sesión explorará las formas en que, como cristianos, podemos edificar una cultura de vida en medio de una sociedad de confusión moral en aumento.

Lee y estudia: El Catecismo Católico de los Estados Unidos para Adultos Capítulo 29 (páginas 409-426).